Terapia para dejar de fumar
¿Has tenido alguna ocasión esa sensación de luchar por tus objetivos? ¿Te sueles distraer con facilidad o te resulta difícil empezar cuando intentas hacer algo? Si te ocurre esto, la hipnosis de objetivos puede ayudarte.
Hay razones por las puede ser que todavía no estés logrando tus objetivos.
Nos puede resultar difícil alcanzar nuestros objetivos por varias razones. A veces podemos encontrarnos con objetivos difíciles de llevar a cabo, puesto que no estamos seguros de qué pasos tomar para llegar a logarlos, o quizá no estamos concentrados.
Puede ocurrir que una persona se da por vencida con su objetivo al no haberlo conseguido lo pronto que hubiera deseado y se siente fracasada. Porque tenemos miedo a fallar, lo cual nos hace pensar que no vale la pena volver a intentarlo.
Por esas razones, es positivo saber por qué es posible que no se esté logrando el objetivo, intentando cambiar la forma de pensar para motivarnos en lo que deseamos que se haga realidad.
Primero, objetivos pequeños.
Al concentrarnos solo en un objetivo principal, no estamos limitando a otras posibilidades cuyos objetivos podrían alcanzarse.
Todos los demás objetivos, que podríamos alcanzar, los llevamos a un segundo plano o final de la cola.
Curiosamente, para alcanzar un objetivo final, necesitamos tener pequeños objetivos, que son los pasos más pequeños para poder lograr el resultado final. Por eso no hay que concentrarse solo en un objetivo principal.
Si lo que deseamos en perder peso, lo primero que debemos conseguir es cambiar nuestra dieta diaria, como el primer hábito saludable.
Qué es la hipnosis.
La hipnosis todavía es una ciencia muy desconocida, a pesar de ser antigua, que puede usarse para el mejoramiento de nuestro propio bienestar menta y físico.
Es un estado mental como la misma penumbra, o el trance, por el cual las personas experimentan mayor concentración y sugestión. Así es la hipnosis terapéutica. Y trabaja el inconsciente y el consciente a la vez.
En la sesión, la persona es totalmente consciente del lugar en el que está, de lo que escucha, de todo. No va a realizar nada que la persona no esté dispuesta a hacer, puesto que es plenamente consciente.
El hipnotista guía a la persona, evaluando con el pensamiento, el comportamiento, incluso puede ser que, con experiencias pasadas, sus emociones y las sensaciones.
Para qué acudir a sesión de hipnosis.
La hipnosis es una técnica de relajación profunda, en la que entramos en estado de penumbra. Se emplea para ayudar a las personas en la búsqueda de objetivos y en tratamientos de pacientes, donde ya intervienen psicólogos experimentados.
Si hay objetivos que queremos alcanzar, y no podemos llevarlos a cabo por nosotros mismos, podemos acudir a un hipnotista de objetivos. Como es el caso de las adiciones, sobre todo cuando se quiere dejar de fumar y no se puede por propia voluntad.
Sus efectos.
De los estudios realizados, se observa que la hipnosis tiene efectos positivos en el cerebro. La persona hipnotizada puede profundizar en sus recuerdos, mejorando su memoria. Favorece la estabilidad emocional y a dormir mejor, puesto que relaja.
Sus efectos se notan en la corteza cerebral, ya que se incrementa la conexión entre la zona dorsolateral y la insular, que está vinculada a la percepción, las emociones y las adiciones, además del dolor también.
Cómo funciona la hipnosis de objetivos.
En principio se parece a la sofrología, aunque se diferencia en la forma de la relajación profunda. También se establece una sugestión donde se facilita la comunicación entre la persona interesada y el profesional.
Primero, el profesional entrevista a la persona interesada, conociendo sus problemas, el propósito que lo lleva a la hipnosis y qué es lo que quiere mejorar.
Después el hipnotista trabajará con el inconsciente, usando sugestiones para guiar a la mente a que pueda llevar a cambio o la mejora deseada.
Al cabo de unas sesiones, que se determinará entre las dos partes, se estudiará ese cambio o mejora para evaluar la nueva situación.
Quién puede usar la hipnosis.
La hipnosis no puede ser usada por todas las personas. Algunas no logran relajar su menta para poder entrar en estado de penumbra y así acceder al inconsciente. El motivo se encuentra en sus propios cerebros, en sus neuronas.
La actividad hipnótica está relacionada con la neuronal y con la concentración que tenga la persona. Por esa razón, cuanto mayor es su actividad cerebral, mayor será su concentración y más fácil será para poder hipnotizar.
¿Quieres conocer algunas cuestiones que te sorprenderán de la hipnosis?
- La persona hipnotizada está despierta durante la sesión.
Tiene el beneficio de una meditación hipnótica.
- En ocasiones estamos hipnotizados sin saberlo.
Ocurre cuando estamos en penumbra, a punto de dormirnos. Y cuando cruzamos la calle sin darnos cuenta cómo la hemos cruzado.
- Si lo deseas, puedes perder la memoria.
Todos los acontecimientos que han sido negativos y no los quieres volver a recordar.
- Al estar hipnotizado el cerebro mantiene tu orden.
La hipnosis va a permitir al cerebro mantener la orden que le diste en sesión y lograr los objetivos. El cerebro gana en hiperconsciencia, controlando mejor lo que la mente ha de llevar a cabo.
- Nunca te vas a quedar atrapado en el trance (penumbra).
Cuando entramos en penumbra, o trance, no podemos quedarnos dentro para siempre. El control final siempre es del hipnotizado.
- La hipnosis es diferente para cada persona.
Hay diferentes experiencias de hipnosis. Es completamente diferente en cada persona hipnotizada.
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